De Libros
El reto del humanismo tecnológico ante el Renacimiento biónico
Luis Enrique Echarte, doctor en Neurociencia y profesor de Bioética en la Universidad de Navarra, presenta 'Te enamorarás de una máquina': cómo responder, desde la propuesta cristiana, a la singularidad tecnológica
José Francisco Serrano Oceja | 08/12/25
Como señala nuestro autor, Luis Enrique Echarte, profesor de bioética en la Universidad de Navarra y uno de los expertos más reputados en el ámbito de la neurociencia, si el sigo XX estuvo dirigido por las utopías de carácter político, el XXI lo está por las utopías de carácter científico. El XX probablemente lo hará por las estéticas.
- Una humanidad nueva
- Tecnología y progreso humano
- Renacimiento biónico, donde hombre y máquina serán un todo
- Diferencia entre “transhumanismo” y “posthumanismo”
Luis Echarte, médico, filósofo y profesor.
Una humanidad nueva
Por tanto es el momento de pensar sobre esas utopías científicas, sin olvidar las políticas, lógicamente, que fundamentan la “biopolítica”. Las utopías científicas son algo más que el transhumanismo y unas nuevas formas de relacionarse el hombre con la máquina. De lo que se trata es de crear un hombre nuevo, una humanidad nueva.
Cuando hago referencia a las utopías como sistemas ideales, también de relación, estamos hablando de los fundamentos mismos sobre los que se construye no sólo la civilización sino la aplicación de la técnica en lo que tiene que ver con la cultura.
Desde hace no poco tiempo hemos asimilado el dogma del progreso, que a estos efectos es el dogma del progreso tecnológico, uno de los más extendidos espantadores del miedo social.
Tecnología y progreso humano
Ese dogma tiene dos axiomas principales: la tecnología es el principal responsable del progreso humano y los obstáculos del pasado, incluso los que nos podamos imaginar, ya fueron superados.
Este horizonte alimenta nuestras creencias más básicas y nuestra sensibilidad cultural.
En los últimos tiempos estamos asistiendo a la proliferación de propuestas críticas con el progreso que nos pretenden colocar en el retroceso, en un inexistente paradigma primitivista en pos de las consecuencias comprobadas de ese progreso.
La respuesta no es el nuevo primitivismo tecnológico, en el que emerge un nuevo modelo de ser humano transhumano, sino una propuesta de verdadero humanismo tecnológico que supere incluso las versiones buenistas, o “cool”, del humanismo basado en las meras regulaciones del uso responsable. Piénsese en lo que estamos haciendo con la IA.
Renacimiento biónico, donde hombre y máquina serán un todo
A partir de ahí se han desarrollado una serie de fenómenos como la medicalización de la condición humana, con sus categorías diagnósticas, como muestra también de cómo la tecnología redefine el acto médico y mucho más que el acto médico.
Son ese conjunto de creencias, en particular las que afectan desde la biotecnología al principio y al final de la vida, las que se analizan aquí a fondo para dar un paso más.
Por un lado, reflexiona nuestro autor sobre lo que significa la naturaleza humana, es decir, la condición humana, y por otro propone una serie de criterios para poder movernos en ese enmarañado mundo que nos coloca a las puertas del Renacimiento biónico, donde hombre y máquina serán un todo.
Diferencia entre “transhumanismo” y “posthumanismo”
Cuando hablamos del Renacimiento biónico inmediatamente pensamos en una serie de películas, series de ficción y novelas. De entre ellas propongo como un modelo de lo que significa llevar todo este proceso hasta las últimas consecuencias el de la serie “Altered Carbon”.
De entre las muchas aportaciones de este libro está la de enseñarnos la diferencia entre “transhumanismo” y “posthumanismo” o colocarnos en la reflexión sobre cómo esta realidad, algo más que viniente, afecta e interpela a la fe, además de a la razón.
De lo que se trata, por tanto, es de una aportación valiosa sobre cómo responder, desde la propuesta cristiana, a la singularidad tecnológica.
Luis Enrique Echarte,
Te enamorarás de una máquina.
Rialp, 2025.
