Familia
One of Us alerta en el Parlamento Europeo del riesgo de un “turismo del aborto” financiado por la UE
A raíz de la incitativa ciudadana "Mi voz, mi decisión: por un aborto seguro y accesible" que pretende crear un mecanismo financiero de solidaridad para ayudar a los Estados miembros a costear abortos
09/12/25 | M. S.
La audiencia celebrada el 2 de diciembre en el Parlamento Europeo sobre la Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) My Voice, My Choice (MVMC) ("Mi voz, mi decisión: por un aborto seguro y accesible") ha generado un intenso debate político y jurídico.
- Acceso a un aborto seguro y asequible
- Implicaciones legales y éticas
- Un riesgo para la soberanía nacional
- Compatibilidad con los Tratados de la UE
- Presión sobre los Estados miembros
- Claridad sobre la financiación de la campaña
- Aborto selectivo por discapacidad
- “La ideología jamás puede prevalecer sobre los Tratados”
- Llamamiento a las instituciones europeas
El abogado maltés Tonio Borg, presidente de One of Us.
Acceso a un aborto seguro y asequible
Su objetivo principal es pedir a la Comisión Europea que presente — o promueva — una norma que garantice que todas las mujeres de la UE, independientemente del país donde residan, tengan acceso a un aborto seguro, legal y asequible.
La propuesta, que busca crear un mecanismo europeo para financiar la movilidad de mujeres que deseen abortar en otros países de la UE, fue recibida con fuertes críticas por parte de numerosos eurodiputados y organizaciones civiles.
Entre ellas, la Federación Europea ONE OF US, representada en España por la Fundación Jérôme Lejeune, que advirtió sobre un “turismo del aborto” financiado por la UE y alertó sobre los riesgos que la iniciativa podría suponer para la democracia europea, la soberanía de los Estados miembros y el respeto a los Tratados de la Unión.
Implicaciones legales y éticas
La audiencia, organizada conjuntamente por las comisiones FEMM, PETI, LIBE, SANT y DEVE, reunió a representantes de varios grupos políticos y a la comisaria Hadja Lahbib. Mientras los promotores de MVMC defendían su propuesta, buena parte de los eurodiputados expusieron sus preocupaciones sobre las implicaciones legales, éticas y sociales del mecanismo planteado, al que algunos calificaron directamente como una forma de “turismo del aborto” con financiación europea.
Un riesgo para la soberanía nacional
ONE OF US —nacida de la ICE más apoyada en la historia de la Unión, con 1,89 millones de firmas— advirtió que MVMC pretende legislar en un ámbito que no es competencia de la UE. Según la federación, utilizar fondos europeos para financiar abortos no solo vulneraría la soberanía jurídica de los Estados miembros, sino que supondría “un daño importante” para el proceso de integración europea.
Desde el inicio de la audiencia, varios eurodiputados recordaron la magnitud de respaldo ciudadano que obtuvo One of Us. Paolo Inselvini (ECR, Italia) destacó que “ninguna otra iniciativa ha movilizado tanto a los ciudadanos”, subrayando la dimensión del apoyo a la protección del embrión humano.
Compatibilidad con los Tratados de la UE
Uno de los puntos más repetidos por los eurodiputados fue la supuesta incompatibilidad de MVMC con los Tratados europeos. El luxemburgués Fernand Kartheiser insistió en que los Tratados “defienden el derecho a la vida” y que, si la Comisión Europea atendiera la solicitud, “violaría directamente el derecho europeo”.
En la misma línea, el croata Tomislav Sokol (PPE) remarcó que el aborto “no forma parte de los Derechos Humanos” y que “ningún tratado internacional lo reconoce como tal, por lo que la Unión Europea no puede financiarlo”.
Para varios diputados, permitir que la UE asuma competencias en materia de aborto supondría una vulneración directa del principio de subsidiariedad, uno de los pilares institucionales de la Unión.
Presión sobre los Estados miembros
Otra preocupación frecuente fue el efecto que podría tener la iniciativa sobre los países que mantienen legislaciones más restrictivas. El esloveno Matej Tonin (PPE) y la eslovaca Miriam Lexmann (PPE) coincidieron en que ningún instrumento financiero europeo debe “vulnerar la soberanía de los Estados miembros” ni actuar como una forma de presión para modificar leyes nacionales.
Laurence Trochu (ECR, Francia) advirtió que la propuesta “sobrepasa claramente las competencias europeas y viola la autoridad soberana de los Estados miembros”.
Claridad sobre la financiación de la campaña
Varios eurodiputados solicitaron claridad sobre la financiación de la campaña MVMC. Inselvini cuestionó si la propuesta reflejaba realmente la voluntad de los ciudadanos europeos, mientras que la española Margarita de la Pisa (PfE) denunció que la iniciativa “está financiada por organizaciones que se benefician del negocio del aborto, como Planned Parenthood”.
Además, insistió en que los derechos de las mujeres incluyen la protección de la maternidad y pidió a los promotores “no atacar a quienes la defienden”.
Incluso eurodiputados favorables al aborto expresaron reservas. La polaca Mirosława Nykiel (PPE) criticó la falta de transparencia financiera y denunció presiones para que algunos parlamentarios no expresaran posiciones discrepantes.
Aborto selectivo por discapacidad
ONE OF US subrayó que la propuesta no solo contravendría los Tratados, sino que además podría facilitar el aborto selectivo por discapacidad, contraviniendo el artículo 21 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, que prohíbe la discriminación por motivos de discapacidad. Según la federación, esto podría reforzar prácticas eugenésicas.
Asimismo, destacó que lo que necesitan las mujeres en Europa son políticas de apoyo real a la maternidad: medidas económicas, atención médica adecuada, recursos de conciliación y protección laboral. “Demasiadas mujeres abortan bajo presión, no por elección”, señala ONE OF US, que considera prioritario trabajar para ofrecer alternativas y acompañamiento.
“La ideología jamás puede prevalecer sobre los Tratados”
El presidente de ONE OF US, el profesor Tonio Borg, afirmó que la audiencia estuvo marcada por “fuertes reivindicaciones ideológicas”, recordando que los Tratados europeos fijan límites claros sobre las competencias de la UE. “Las cuestiones relativas a la vida pertenecen a los Estados miembros, no a Bruselas”, afirmó.
Llamamiento a las instituciones europeas
En este línea, ONE OF US solicita a las instituciones de la UE que rechacen firmemente la propuesta de MVMC, respeten los Tratados y protejan tanto el Estado de derecho como la autoridad democrática de los Estados miembros. La federación pide priorizar políticas que apoyen a las mujeres embarazadas, defiendan a las personas con discapacidad y garanticen la dignidad humana.
Como la ICE más respaldada de la historia, ONE OF US reclama que se escuche la voluntad de los ciudadanos europeos y que la UE centre sus decisiones en el derecho y no en la ideología.